Tuesday, December 31, 2019

TINTIN ON THE MOON: Edición conmemorativa del quincuagésimo aniversario de la llegada a la Luna

En este 2019 que hoy mismo se cierra se cumplió el medio siglo desde que el ser humano dio los primeros pasos sobre la Luna. Pero todos los tintinófilos sabemos perfectamente que Tintín y los suyos se adelantaron en la ficción de las viñetas del cómic a la Historia con mayúsculas. Y se adelantaron en casi dos décadas, aunque Hergé, con la modestia que le caracterizaba, le dijo a Numa Sadoul en su libro de Conversaciones que "hablando de precursores, hubo un cierto Julio Verne" y que todo lo que hizo él en esta aventura bipartita no fue otra cosa que "novelar unos libros que ya existían" (107). En todo caso, Tintín, el capitán Haddock y el profesor Tornasol prefiguraron en Objetivo: la Luna y Aterrizaje en la Luna, serializados originalmente entre 1950 y 1953, mucho de lo que después experimentarían en la vida real Neil Armstrong, Buzz Aldrin y compañía. Y para conmemorar el quincuagésimo aniversario de tal hazaña—que coincide, por cierto, con los noventa años de existencia de Tintín y Milú—se ha publicado en varias lenguas un volumen que recoge los dos episodios lunares, una edición muy cuidada y en tapa dura que nos permite leer de principio a fin la aventura de Tintín en la Luna.

Yo he conseguido la versión en inglés, bajo el título general de Tintin on the Moon y con la traducción clásica ya bien conocida en el mundo anglosajón de Leslie Lonsdale-Cooper y Michael Turner, y es una delicia releer de un tirón este épico viaje de Tintín y sus amigos desde Syldavia a nuestro querido satélite. El único pero que le pongo a esta nueva edición es el hecho de que carece de una introducción escrita por algún experto en Tintín o en la bande dessinée, que habría servido para ilustrar con mayor profundidad dos de los álbumes más icónicos de la obra hergeana y recordar como lo merece esta importante efeméride. De todos modos, cualquier coleccionista que se precie debe tener este libro, aunque sólo sea por su valor histórico, y lo que sí me parece un verdadero acierto es esa frase de Hergé que se ha incluido en la contraportada: "À force de croire en ses rêves, l'homme en fait une réalité", es decir, "a fuerza de creer en sus sueños, el hombre los hace realidad".




Sunday, December 29, 2019

Tintín y Hergé, Vídeo 5: EL LOTO AZUL (1934-35)

Como es sabido, El loto azul, serializado originalmente entre agosto de 1934 y octubre de 1935 en blanco y negro en el Petit Vingtième, supuso un antes y un después en la obra de Hergé en más de un sentido. Aunque en un principio no era más que la continuación de una historia titulada Tintín en el Extremo Oriente, que se había iniciado con Los cigarros del faraón, acabó convirtiéndose en uno de los álbumes fundamentales de la serie. Por un lado, Hergé comenzó a documentarse más a conciencia para la creación y ejecución de la trama y los escenarios, huyendo de estereotipos e implicándose más personalmente en el proceso de creación. Por otro lado, su encuentro con el joven artista chino Tchang Tchong-Jen le abriría las puertas a toda una nueva concepción artística, además de forjar una amistad que ejercería una innegable influencia en la vida y en el trabajo de Hergé. En definitiva, el dibujante bruselense comenzó a tomarse a Tintín en serio, y las aventuras dejan de ser un divertimento para convertirse en una dedicación total a la que entregar el resto de su vida. En el quinto vídeo de la serie Tintín y Hergé que vengo publicando en mi canal de YouTube ofrezco un comentario crítico acerca de un álbum tan fascinante como decisivo en la obra de Hergé.




Tuesday, December 24, 2019

FELICES FIESTAS TINTINÓFILAS Y LO MEJOR PARA EL 2020

Con esta breve entrada quiero desear a quienes leen y siguen el blog Tintinesca unas muy felices fiestas y todo lo mejor para el nuevo año 2020 que se inicia en unos cuantos días. Por razones profesionales me ha resultado muy difícil publicar nuevas entradas en el blog en los últimos meses, pero comenzaré el año nuevo con el firme propósito de actualizar esta publicación con la mayor regularidad posible, además de continuar con la serie de vídeos sobre Tintín y Hergé que disponibilizo en mi canal de YouTube. Y con objeto de desearos unas felices fiestas dondequiera que os encontréis, os dejo aquí este dibujo navideño tintinesco firmado por Hergé. Quizá una de las facetas más desconocidas y menos estudiadas del gran dibujante belga sea la de ilustrador y publicista, campos en los que se reveló también como un creador muy interesante, como podemos comprobar en esta felicitación navideña que protagonizan Tintín y Milú. Joyeux Noël!!!


Wednesday, August 21, 2019

Más allá de Tintín: POPOL ET VIRGINIE CHEZ LES LAPINOS (1934)

Publicada por primera vez en el Petit Vingtième entre febrero y agosto de 1934 (coincidiendo con el período de espera entre el final de Los cigarros del faraón y el inicio de El loto azul), Popol et Virginie chez les Lapinos es una obra menor de Hergé que no ha suscitado demasiada atención crítica. Su génesis nos lleva al personaje de Tim l'Écureuil, una ardilla-cowboy que el dibujante creó para unos grandes almacenes bruselenses en 1931, y también a la brevísima serie de Tom y Millie, dos osos cuyas aventuras aparecieron en el suplemento del periódico La Meuse en 1933. Un año después nacían Popol y Virginie en las páginas del Petit Vingtième, y aunque la historia no fie demasiado bien recibida debido a que los lectores preferían una nueva aventura de Tintín, Hergé la recuperaría 14 años después, en 1948, modernizándola un poco y publicándola en color en el semanario Tintín.

Debido a que es una obra pensada para un público infantil, Popol et Virginie cuenta con una trama bastante sencilla, en la que Hergé, sin embargo, desliza temas más complejos dirigidos a lectores adultos, como pueden ser la crisis económica (no olvidemos que se publica durante la Gran Depresión), el proteccionismo, el tráfico de armas, la manipulación de las masas o la xenofobia. Además, es un cómic que nos permite observar de forma clara y sencilla la técnica narrativa que el dibujante empleaba en estos primeros años de su carrera profesional, poco antes de evolucionar hacia un estilo más sofisticado tras su providencial encuentro con Tchang Tchong-Jen. Como señala el tintinólogo Benoît Peeters en su estudio Tintin y el mundo de Hergé, "Popol et Virginie es el más simple de los cómics de Hergé y tiene el mérito de mostrar claramente su técnica narrativa. Todas sus reglas funcionan aquí y son claramente visibles. Es interesante para el lector informado que quiera ver la maquinaria de Hergé operando de la manera más básica" (138). La obra fue traducida al español en 1992 bajo el título de Popol y Virginia en el país de los Orejudos (Norma Editorial), y también existe una versión en catalán, pero en estos momentos esas ediciones son mucho más difíciles y caras de conseguir que la versión original francesa o la traducción inglesa, Peppy in the Wild West. En el vídeo que dejo aquí abajo analizo más pormenorizadamente esta curiosa y bastante desconocida obra de Hergé que quizá merezca mayor atención de la que ha recibido.




Tuesday, August 13, 2019

MI COLECCIÓN DE LIBROS SOBRE TINTÍN Y HERGÉ - Parte I

Algunos espectadores de la serie de vídeos sobre Tintín y Hergé que llevo ya más de un año publicando en mi canal de YouTube se han dirigido a mí a través de la sección de comentarios e incluso a través de correo electrónico para sugerirme que hiciese un vídeo en el que mostrase mi colección de libros de Tintín. Aunque me pareció una idea interesante, el mayor problema estribaba en que una gran parte de dicha colección se halla todavía en casa de mis padres en Vigo (España), mientras que el material que tengo en mi casa en los Estados Unidos es mucho más reducido por cuestiones de espacio y la dificultad y el coste de transportar algunos de los libros.

El tintinólogo Benoît Peeters
Sin embargo, se me ha ocurrido una manera de solucionar este problema: he grabado una primera parte en la que muestro y ofrezco breves comentarios críticos sobre cada uno de los libros que pongo ante la cámara, y en un futuro, cuando viaje a Vigo para visitar a mis padres, grabaré y publicaré una segunda parte centrándome en los libros que aún tengo allí. En este primer vídeo he decidido seleccionar, sobre todo, volúmenes acerca de Tintín y Hergé, como los escritos por tintinólogos y críticos de la talla de Benoît Peeters, Philippe Goddin, Pierre Sterckx o Michael Farr, y también comento las Conversaciones con Hergé de Numa Sadoul o El siglo de Tintín, del madrileño Fernando Castillo. Dejo el vídeo aquí abajo, deseando que os resulte interesante.




Monday, July 1, 2019

ENTREVISTA CON TÒNHO CASTET, traductor de Tintín al aranés


Tonho Castet

Recientemente, la editorial Zephyrum, con sede en Barcelona, ha publicado el álbum de Tintín Las joyas de la Castafiore en seis variedades lingüísticas diferentes habladas en España: el gallego, el euskera, el valenciano, el aragonés, el castúo y el aranés. El traductor de la aventura a esta última lengua, hablada por varios miles de personas en el Valle de Arán, es Tònho Castet, fundador de la Associacion Es Paums y colaborador en el Institut d'Estudis Aranesi, una persona que ha dedicado toda su vida a promover la lengua y la cultura aranesas. Con él hemos tenido la oportunidad de conversar recientemente, y en esta entrevista nos habla del aranés y de esta nueva traducción de una de las obras más conocidas y populares de Hergé, vertida a la lengua del Valle de Arán como Es Jòies dera Castafiore.

Tintinesca: Tònho, acabas de traducir por primera vez al aranés una de las aventuras de Tintín, que es además la que se ha publicado en más lenguas en el mundo. ¿Cómo se inició tu interés por los cómics de Tintín? ¿Qué recuerdos guardas de tus primeras lecturas de las aventuras del reportero belga?

Tònho Castet: Yo nací y pasé mi infancia en el Valle de Arán, una zona fronteriza con Francia, lo que propiciaba las relaciones comerciales y el intercambio de todo tipo de mercancías, entre ellas los cómics. Así fue como cayeron en mis manos los álbumes de las aventuras de Tintin. Puedo decir que aprendí a leer y escribir en francés gracias a las peripecias del reportero belga. En ese mundo de fantasía que eran las aventuras tintinescas, viajé en mi imaginación por países exóticos, sin moverme de la silla de mi casa. Esperaba con verdadera impaciencia la aparición del próximo número.

Tintinesca: Háblanos un poco acerca de la lengua aranesa. ¿Dónde se habla, de dónde procede y en qué grado de normalización se encuentra?

T. Castet: El aranés se habla en el territorio de la Val d’Aran, una zona en el norte de la Comunidad autónoma de Catalunya (España). Es la lengua propia de sus casi diez mil habitantes. Es la lengua oficial, junto con el catalán y el español. El aranés es la variante en la Val d’Aran del occitano y es por tanto una lengua románica con un itinerario histórico-linguistico compartido con el catalán. Podríamos decir que el aranés, el catalán y el occitano son lenguas hermanas. La lengua aranesa ha perdurado durante siglos, en parte quizás a su aislamiento geográfico en las montañas del Pirineo. Sin embargo, en la actualidad su continuidad está seriamente amenazada y solo la hablan la mitad de sus habitantes. El Conselh Generau d’Aran, que es el gobierno autonómico, hace grandes esfuerzos para potenciar el uso del aranés, que goza de un elevado grado de normalización, ya que el país dispone del Institut d’Estudis Aranesi, Academia Aranesa dera Lengua, que es la máxima autoridad en materia lingüística.

Tintinesca: ¿Cuándo y cómo surgió el proyecto de traducir Las joyas de la Castafiore al aranés?

T. Castet: Los co-editores Zephyrum y Trilita se pusieron en contacto conmigo a través de la Academia Aranesa dera Lengua, de la que soy colaborador y me ofrecieron participar en el proyecto. Acepté de inmediato y encantado.

Tintinesca: ¿Cómo afrontaste la traducción? ¿Basándote únicamente en el original francés o con consultas a las traducciones ya existentes al español o al catalán?

T. Castet: Para ser fiel al espíritu de Hergé, traduje directamente de la edición en francés de Casterman de 1963.

Tintinesca: Háblanos de algunas dificultades a las que te hayas enfrentado durante el proceso de traducción o de algunas anécdotas interesantes surgidas mientras la realizabas.

T. Castet: Aún tratando de ser fiel al original, he hecho una adaptación de los contenidos del album número 21 de las aventuras de Tintin a la realidad aranesa, lo que lo hace más próximo y comprensible. En ese sentido hemos adaptado la toponimia de las aventuras de Tintín a la geografía aranesa, Trons deth Montlude!!!, Relampits de Lairissa!!!, también los insultos del malhablado Capitan Haddock se han trasladado al aranés, Mila canaules!!!, Feniantàs!!!, exclamaciones genuinas aranesas como Moria!!!, Non te n’hèsques!!!. Además, en la trama aparecen personajes reales de la Val d’Aran, Tino eth retetaire, Joan des Canaules, Banda Es Paums, Es Paoesses de Vilamòs, Transports Gregòrio, etc..

Tintinesca: Decíamos al principio que Las joyas de la Castafiore es el libro más traducido de todos los que conforman la saga de Tintín, y es quizá también el más popular. ¿A qué factores atribuyes esto?

T. Castet: Las Joyas de la Castafiore es el número 21 de la serie de 24 que escribió Hergé y quizás encontramos a un autor más maduro. Es el único álbum en que la trama no ocurre en ningún viaje al extranjero, sino que todo ocurre en el castillo de Moulinsart.

Tintinesca: Esta traducción al aranés ha tenido una muy buena acogida hasta el momento. ¿Has recibido ya algunos comentarios de lectores o coleccionistas tintinófilos?

T. Castet: Ha tenido una acogida excelente y los co-editores se están planteando continuar con la traducción de los 23 títulos restantes. Al tratarse de una lengua minoritaria—la Val d’Aran no supera los diez mil habitantes—, la traducción de obras al aranés es poco atractiva comercialmente para las grandes editoriales; sin embargo, el nivel de edición de textos en aranés es elevado en proporción al número de lectores. Por ejemplo, el pasado Sant Jordi, día del libro, se presentaron cuatro publicaciones en aranés, entre ellas Es Jòies dera Castafiore de Tintin, todas ellas ediciones de iniciativa privada.

Tintinesca: ¿En qué medida crees que este proyecto de traducción al aranés de los álbumes de Tintín contribuirá a la normalización y difusión de la lengua aranesa?

T. Castet: Esta edición en aranés supone una ayuda para nuestra lengua ya que ella, nuestras expresiones, nuestros personajes tendrán una difusión internacional por cuanto que una buena parte de los lectores que han adquirido Es Jòies dera Castafiore son tintinófilos y coleccionistas de todo el mundo.

Tintinesca: Nos preguntamos si la elección de Las joyas de la Castafiore como primera traducción aranesa fue una elección personal tuya o una decisión de la editorial.

T. Castet: La idea de traducir la número 21 fue decisión de la editorial, que para la próxima traducción ha elegido Aterrizaje en la luna, coincidiendo con el 50 aniversario de la llegada del hombre a la luna.

Tintinesca: Para terminar, Tònho, nos gustaría que respondieses a esta última pregunta directamente en aranés, para que nuestros lectores se hagan una idea de cómo es dicha lengua. ¿Qué significa para ti la figura de Tintín y el universo que Hergé creó alrededor de este personaje? ¿Por qué crees que sigue fascinando a los lectores noventa años después de su nacimiento?

T. Castet: Entà jo, un mainatge de Vilamòs d’un petit pòble de montanha dera Val d’Aran, descorbir a Tintin, siguec coma daurir era hièstra a un mon de païsi, personatges, situacions, que me hègen a somniar e a viatjar per tot sense botjar-me de casa. Ath delà trapé valors coma era solidaritat e era amistat enes planes de Tintin. Pensi que aqueri valors encara fascinen as lectors d’aué en dia.

Agradecemos a Tònho Castet su amabilidad y su disponibilidad para contestar a nuestras preguntas sobre su traducción de Las joyas de la Castafore al aranés, y dejamos aquí al final una grabación que el propio Tònho ha realizado de la respuesta a esta última pregunta en aranés con objeto de que los lectores puedan escuchar el sonido de esa lengua.



Saturday, June 1, 2019

MICHEL SERRES (1930-2019): Filósofo y amigo de Hergé

Michel Serres
Acabo de enterarme del fallecimiento de Michel Serres, filósofo y crítico francés de enorme prestigio dentro del mundo académico, que en vida fue buen amigo de Hergé y que dedicó algunos ensayos de gran interés a Tintín caracterizados, como no podía ser de otro modo, por un marcado trasfondo filosófico. Nacido en Agen en 1930, Serres fue contemporáneo de Michel Foucault, con quien mantuvo una interesante correspondencia, y conjugó una obra filosófica de notable profundidad aunque no siempre fácil de digerir por la complejidad de su expresión lingüística, con una importante presencia en los medios de comunicación de masas franceses. A lo largo de los años, además de ejercer la docencia universitaria en Francia o en los Estados Unidos y de entrar a formar parte de la Académie Française, Serres se prodigó con regularidad en radio y en televisión y llegó a aparecer en más de una película dirigida por el canadiense Pierre Perrault.

El libro de Serres que interesará especialmente a los tintinófilos es Hergé mon ami, en el que se recoge un retrato de la figura del dibujante a cargo del filósofo, así como una serie de estudios sobre diversos aspectos de algunas entregas tintinescas, como Tintín en el Tíbet o Las joyas de la Castafiore. Tal y como lo explica el autor en la contraportada del volumen, "este libro pretende devolverle a Hergé una parte de los tesoros que me ha dado: el encantamiento de la infancia, los sueños de la juventud, las meditaciones de la edad madura, y esa bella amistad que, como su obra, creo que no tendrá fin". Como colofón a esta breve entrada en memoria de este ilustre tintinófilo, dejo aquí un programa de la televisión francesa en el que el propio Serres habla acerca de su libro y de su relación con Hergé.


Monday, May 20, 2019

Rarezas tintinescas: La primera versión en color de LA ISLA NEGRA (1943)

Una de las aventuras de Tintín que han gozado de mayor popularidad y de traducciones a más lenguas es La isla negra, y reconozco que se encuentra entre mis entregas favoritas de la serie y la he leído y releído en innumerables ocasiones. Es también uno de los títulos que más transformaciones sufrieron a lo largo de los años; de hecho, la versión que todos conocemos hoy en día es la última, publicada en la década de los 60, unos 25 años después de la primera versión en blanco y negro que apareció serializada en el Petit Vingtième en 1937-38 y que Casterman publicaría en forma de álbum poco después. Como todas las primeras aventuras de Tintín que originalmente se crearon sin color, Hergé redibujó y coloreó La isla negra en 1943, reduciendo a la mitad el número de páginas, con todo lo que eso significaría para una de las tramas de acción detectivesca más dinámicas entre las creadas por el dibujante belga. Pero la cosa no quedó ahí: cuando la editorial británica Methuen & Co. decidió finalmente publicar esta aventura con destino al mundo anglosajón en 1966, los responsables de la compañía solicitaron a Hergé que modernizara varios elementos que aparecen en la historia porque les parecía que visualmente había quedado un tanto desfasada. Hergé aceptó, al parecer sin rechistar, y envió a su colaborador Bob de Moor a Inglaterra para que tomase croquis y apuntes gráficos que posibilitasen la modernización que los editores ingleses deseaban. Desde luego, esta nueva revisión de la aventura está mucho más acorde con el momento histórico en el que se publicó, si bien no está exenta de ciertas incongruencias: en particular, la escena en la que Tintín se topa en la isla escocesa con un televisor, aparato mucho más común en los años 60 que en los 30, y que en la versión de 1943 recibía imágenes en color mientras que en la de 1966, curiosamente, las emitía en blanco y negro. Por fortuna, en 1986 la editorial barcelonesa Juventud sacó al mercado una traducción al español de la primera edición coloreada, cuya portada original aparece en la parte superior de esta entrada. El cotejo de esta versión con la más difundida realizada en los años 60 es fascinante, no tanto por diferencias en la trama—que no las hay—, sino porque nos da una idea muy precisa de la evolución artística que había experimentado Hergé en los más de veinte años que separan estas dos revisiones en color de una de las entregas más memorables de la saga tintinesca.

Hergé y su colaborador Bob de Moor.

Monday, May 13, 2019

Rarezas tintinescas: DUPONT ET DUPOND, DÉTECTIVES (1943), de Paul Kinnet

El escritor belga Paul Kinnet
En septiembre de 1943, tras la conclusión de la publicación de El tesoro de Rackham el Rojo, empezó a aparecer en Le Soir una novela breve por entregas titulada Dupont et Dupond, détectives, cuyo principal objetivo era dar un respiro a Hergé hasta el inicio de la nueva aventura de Tintín, que acabaría siendo Las siete bolas de cristal. El autor del texto era Paul Kinnet, un amigo de Hergé que por entonces se había ido labrando una cierta reputación como escritor de novelas policíacas, y cada una de las 41 entregas diarias estaba ilustrada por un dibujo firmado por el creador de Tintín. Kinnet, que había nacido en Bruselas en 1915, se llamaba en realidad Paul Maury, y en el momento en que redacto estas líneas no he conseguido encontrar información fehaciente con respecto a su fallecimiento, por lo que es posible que continúe entre nosotros, aunque de ser así contaría con más de cien años de edad. Tras completar la carrera de derecho en Lovaina, Kinnet se dedicó principalmente al periodismo, y en los años 40 comenzó a escribir novelas de temática policíaca, algunas de ellas, como la popular Chambre de mort à Barcelone, ambientadas durante la Guerra Civil Española, conflicto sobre el que ya había publicado artículos en prensa. Después de la II Guerra Mundial se dedicó a la traducción, actividad que conjugó con la escritura de más novelas detectivescas bajo diversos seudónimos. Parece ser que también cultivó el género de aventuras, llegando a recibir un galardón por su obra Voir Beaubourg et mourir en 1978.





Kinnet muy probablemente entró en contacto con Hergé en Le Soir, y en su biografía del dibujante, Pierre Assouline apunta que la idea para la novelita basada en los personajes de Hernández y Fernández se le ocurrió al propio Kinnet, que se la habría propuesto a Hergé en un café de la rue Royale en los siguientes términos: "Préstamelos [a los detectives] y en un par de días te entrego la primera parte de mi historia ya dividida en páginas, y todo lo que tienes que hacer es ilustrarlas". Hergé, que llevaba mucho tiempo sin ilustrar textos de otros autores, sin duda aceptó la propuesta con objeto de ganar tiempo, ya que por entonces no tenía aún claros todos los detalles de la siguiente aventura de Tintín y estas ilustraciones no le suponían demasiado trabajo. La novela nos presenta a Hernández y Fernández tomándose unas vacaciones en una granja después de regresar de la expedición de la búsqueda del tesoro de Rackham el Rojo, pero su descanso se ve interrumpido cuando una noche el dueño de la granja desaparece sin dejar rastro. Los dos detectives lograrán—de una manera muy forzada, eso sí—resolver el misterio, pero no sin antes verse inmersos en una serie de situaciones absurdas que ponen en evidencia su particular sentido de la lógica y de la deducción. En su estudio Hergé, fils de Tintin, el experto hergeano Benoît Peeters describe la historia como "mediocre", y no le falta razón, pues su calidad literaria es más que discutible y hoy en día sólo la recordamos por su relación con el universo de Tintín. De hecho, esta rareza nunca se ha publicado oficialmente en forma de libro, si bien puede encontrarse fácilmente en más de una página web (por ejemplo, aquí, donde se han escaneado las entregas originales tal y como salieron en Le Soir) y reviste interés para los tintinófilos sobre todo debido a las poco conocidas ilustraciones de Hergé que acompañan el texto y que sí valen mucho la pena.



Friday, May 10, 2019

Conferencias sobre Tintín: LOS IDIOMAS DE TINTÍN, por Pedro J. Rey Sanchiz

El tintinólogo y coleccionista gallego Pedro J. Rey Sanchiz.
Desde muy tierna edad me han fascinado las lenguas, hasta tal punto que me dedico profesionalmente a la enseñanza del español en Estados Unidos a nivel universitario. Y Tintín, por supuesto, ha tenido una importante influencia en dicha afición. Ya desde niño me preocupaba por encontrar ejemplares de las aventuras del reportero bruselense en otros idiomas como el gallego, el latín, el francés o el inglés, y en la actualidad me dedico a coleccionar al menos un ejemplar de Tintín en el mayor número de lenguas posible. En este sentido, la conferencia que hace un tiempo pronunció el tintinólogo gallego Pedro J. Rey Sanchiz en la Universidad de Vigo bajo el título de Os idiomas de Tintín es de visión obligada. A lo largo de una media hora y en lengua gallega, mi amigo Pedro va ofreciendo amplia información sobre curiosidades relacionadas con las traducciones de los álbumes de Tintín a diversas lenguas y dialectos (rarezas, los nombres de los personajes, etc.) y también esboza una breve historia de las versiones de los libros de la serie en variedades lingüísticas habladas en España. En definitiva, la ponencia constituye una muy valiosa introducción a un tema que siempre me ha apasionado de la mano de alguien que lo domina a conciencia. De hecho, Pedro es autor de una de las mejores páginas web en español sobre Tintín, un blog que podéis visitar aquí y que yo llevo ya mucho tiempo consultando regularmente por la variedad, profundidad y calidad de la información que en él se puede encontrar. Os lo recomiendo encarecidamente y os dejo también al final de esta entrada la conferencia de Pedro sobre los idiomas de Tintín que estoy seguro que todos los lectores hispanohablantes podrán seguir sin mayores problemas.


Wednesday, May 8, 2019

Tintín en catalán: LES JOIES DE LA CASTAFIORE

Que yo sepa, el catalán es la única lengua hablada en España, además del español, que cuenta con traducciones de todos los álbumes de Tintín. Ni el gallego ni el euskera pueden decir lo mismo, aunque, por supuesto, del futuro nada está excluido y esperamos que Tintín vaya hablando cada vez en más idiomas diferentes. La razón de todo esto, creo yo, es que Tintín ha gozado siempre de una enorme popularidad en Cataluña, que es tierra de notable actividad en lo que a Tintín y a la obra de Hergé se refiere, con tiendas especializadas, actos conmemorativos, conferencias y un sinfín de actividades tintinescas organizadas por multitud de entusiastas apasionados del gran dibujante belga y sus creaciones. La entrega de la serie que figura en mi colección en traducción catalana es Les joies de la Castafiore, publicada por la Editorial Juventud en el típico formato de los álbumes de Tintín, y que mis padres me trajeron hace unos años de un viaje a Barcelona, ciudad donde tienen varios amigos y que visitan de vez en cuando. La traducción corre a cargo de Joaquim Ventalló i Vergés, hombre polifacético que fue también periodista y poeta y que llegó a dedicarse a la política, y en la contraportada comprobamos que todas las aventuras de Tintín—incluso su viaje al país de los Soviets y la inconclusa Tintín i l'Art-Alfa—están disponibles en catalán. Curiosamente, Las joyas de la Castafiore es el álbum de Tintín que se ha traducido al mayor número de lenguas, lo que siempre me ha llevado a preguntarme por las razones que puedan justificar esto. En este sentido, dudo que sea el libro más fácil de traducir desde un punto de vista lingüístico, pues todos ellos presentarán sus dificultades. Me inclino más bien por pensar que su popularidad plurilingüe quizá pueda explicarse por el tipo de historia que Hergé construye en este álbum: una trama de misterio entre las cuatro paredes del castillo de Moulinsart, con la mayor parte de los personajes más reconocibles de la serie, sin un trasfondo histórico o político determinado y con más de un giro sorprendente en el relato. Todo ello contribuye a la creación de un volumen en cierto modo atemporal que trasciende barreras lingüísticas, geográficas y culturales.

Joaquim Ventalló, traductor de Tintín al catalán.

Sunday, May 5, 2019

Tintín y Hergé, Vídeo 4: LOS CIGARROS DEL FARAÓN (1932-34)

Como reportero que era Tintín—aunque prácticamente nunca lo veamos ejercer como tal en el transcurso de sus aventuras—, Hergé quiso enviarlo desde el principio a los confines del mundo. Así pues, tras la Rusia Soviética, el Congo belga y los Estados Unidos, le tocaba el turno a Oriente, y en este sentido, Los cigarros del faraón supone la primera escala en un viaje que Tintín y Milú emprenden rumbo al Lejano Oriente y que desembocará en el álbum decisivo que fue El loto azul. Publicado originalmente en blanco y negro y en forma serializada en el Petit Vingtième entre diciembre de 1932 y febrero de 1934, la aventura aúna la egiptología que tan popular se había vuelto desde el descubrimiento de la tumba de Tutankamón y el tráfico de estupefacientes—en este caso el opio—, una actividad delictiva en la que juegan un papel primordial esos cigarros a los que alude el título. Aunque Hergé continúa improvisando en gran parte la trama, el universo tintinesco va ampliándose con la llegada del comerciante portugués Oliveira da Figueira y, sobre todo, con la primera aparición de los detectives Hernández y Fernández (todavía como agentes X33 y X33bis) y de Rastapopoulos, el villano por excelencia de la obra hergeana que, con el paso del tiempo, se convertirá en el principal enemigo de Tintín. En el cuarto vídeo de la serie Tintín y Hergé ofrezco un comentario crítico sobre este álbum tratando de entenderlo, como siempre, dentro del contexto histórico y social que lo vio nacer.